Un show para sacar a la vicepresidenta de la escena política. Con pruebas falsas, testigos que desmintieron las acusaciones y un proceso lleno de irregularidades, la fiscalía no tuvo pruritos en calificar a la causa de la obra pública en Santa Cruz como "la mayor maniobra de corrupción conocida en la historia del país" y acusó a Cristina Kirchner de ser la jefa de una asociación ilícita. Pidieron que todos los imputados sean inhabilitados de forma perpetua para ejercer cargos públicos. Rechazaron el pedido de la vicepresidenta para ampliar su indagatoria.
Tras nueve jornadas de alegatos en los que los fiscales Sergio Mola y Diego Luciani debieron soportar que sus testigos desmintieran las acusaciones y en medio de un escandaloso show plagado de irregularidades, en una maniobra que no despertó sorpresas solicitaron la pena de 12 años de prisión para Cristina Kirchner.
El fiscal Diego Luciani también pidió que la vicepresidenta y el resto de los exfuncionarios imputados en la causa por la obra pública en Santa Cruz sean inhabilitados de forma perpetua para ejercer cargos públicos. (...)